La ciberseguridad se ha convertido en una de las grandes obsesiones de la seguridad del Estado. El crecimiento de la actividad delincuencial por internet es tremendo. Año tras año, las cifras se duplican o triplican. Pero, en el marco de la cibercriminalidad, lo que más preocupa al Ministerio del Interior y al Ministerio de Industria es la seguridad de las denominadas infraestructuras críticas, esas infraestructuras estratégicas para el buen funcionamiento del Estado.
En el informe anual elaborado por la Secretaría de Estado de Seguridad, se detecta un potente crecimiento en los ataques localizados y rechazados contra estas estructuras.