El ransomware es, probablemente, el tipo de malware más peligroso de los últimos años. Cuando este preocupante software malicioso infecta a los usuarios comienza a cifrar todos sus datos personales en el disco duro con una clave privada, la cual se envía a un servidor controlado por un pirata informático para, posteriormente, pedir el pago de un rescate a cambio de la clave con la recuperar los archivos, clave que, en muchas ocasiones ni siquiera termina de llegar, aunque se realice el pago, perdiendo así tanto el dinero como los archivos.