La amenaza del terrorismo yihadista –es decir, del terrorismo cuya práctica se justifica desde una visión fundamentalista y belicosa del credo islámico que se conoce como salafismo yihadista– existe en Europa Occidental desde el inicio de la década de los noventa del pasado siglo.
En la actualidad, las fuentes genéricas de dicha amenaza son dos: por una parte, el denominado Estado Islámico (EI). Por otra, al-Qaeda y sus ramas o entidades afines. Hasta 2013 fue una amenaza directa o indirectamente relacionada con al-Qaeda, organización formada en 1988 y que durante unos 28 años se mantuvo como la única matriz del yihadismo global. Pero desde 2014, la amenaza de terrorismo yihadista en Europa Occidental procede asimismo de EI, constituido a partir de lo que con anterioridad fue la rama iraquí de al-Qaeda, si bien ahora se presenta como matriz alternativa y rival de la misma por la hegemonía del yihadismo global.