En la actualidad, la Inteligencia Artificial (IA) está generando un gran entusiasmo debido a su potencial para transformar industrias enteras. Según una investigación de Hanwha Vision, proveedor global de soluciones de visión, la IA se ha convertido en una de las principales prioridades de inversión para los líderes empresariales con el fin de impulsar la innovación, mejorar la seguridad y aumentar la rentabilidad.
Para que estos beneficios se concreten, es crucial que exista suficiente confianza en la IA utilizada y en los conocimientos que proporciona. Esto incluye tanto a las personas que consienten la recopilación y análisis de sus datos, como a los empleados que deben actuar según los resultados y recomendaciones de la IA. Sin embargo, algunos de estos temen que la IA pueda desplazar sus puestos de trabajo, lo que puede generar resistencia a su implementación.
Aplicar la IA puede ayudar a las empresas a ser más eficientes y a mejorar su productividad. Por ello, muchas organizaciones están comenzando a nombrar a una figura de alto nivel que defienda el uso responsable de la IA y promueva la visión de la empresa sobre cómo esta tecnología puede potenciar la fuerza laboral, el Director de Seguridad de Inteligencia Artificial.
Este estudio revela que más del 21 % de las organizaciones planean contratar a un Director de Inteligencia Artificial (DIA) para su equipo. Se espera que este puesto se extienda más allá del ámbito de la seguridad, abarcando todos los usos de la IA en la empresa.
El DIA poseerá muchas funciones, entre las que se incluirían la capacidad de alinear la IA con los objetivos comerciales, crear casos de uso, involucrar a las partes interesadas en los planes de IA, garantizar que el uso de esta cumpla con la legislación local y global, y el conocimiento técnico necesario para invertir e implementar soluciones con IA.
Como máximo responsable de regular el uso de la IA, impulsaría la formación necesaria para ayudar a las personas a trabajar junto con la IA y supervisarla. Fundamentalmente, también serían responsables de comunicarse con las partes interesadas sobre el uso de datos por parte de la IA y las protecciones implementadas para mantenerlos seguros.
Los líderes de seguridad están colaborando cada vez más con sus homólogos de IT y operaciones, ya que los sistemas de seguridad de vídeo se están volviendo más complejos, trasladándose a la nube y ofreciendo valor añadido a través de la IA y el análisis de vídeo. Por lo tanto, el DIA sería quien asuma un papel activo en la adopción y el uso de vídeo habilitado para IA en toda la organización.
De hecho, el vídeo con IA ahora se considera un activo importante para superar obstáculos comerciales comunes, como encontrar nuevas eficiencias, controlar costes y gestionar cadenas de suministro complejas. Según Hanwha Vision, casi un tercio (31 %) de los líderes respaldan esta tecnología, en comparación con el 17 % que recurren a la automatización y la robótica.
Deben saber con qué fabricantes trabajar en función de su actitud hacia un uso responsable de la IA, la fabricación ética y el compromiso con la ciberseguridad. Una sólida visión para los negocios permitirá a los DIAs evaluar y demostrar el retorno de la inversión (ROI) de la IA. Las investigaciones indican que por cada dólar invertido en IA, se obtiene un promedio de 3,50 dólares en beneficios, debido a mayores conocimientos, ganancias de productividad y flujos de trabajo automatizados.
A medida que la IA se vuelve más omnipresente, es probable que más empresas incorporen un DIA en los próximos años. Contar con esta figura será valioso, ya que aportará una profunda experiencia empresarial y técnica en el uso de la IA, incluido el vídeo. Además, le ayudará a extraer mayor valor de los datos recopilados por su sistema de seguridad.
En un entorno regulatorio cambiante, el DIA guiará a las organizaciones a través de nuevas leyes sobre el uso de la IA, como la Regulación de la Inteligencia Artificial (Ley de Inteligencia Artificial) de la UE, que entró en vigor en marzo de 2024.
SÍGUENOS EN ...
