La Directiva sobre la Ciberseguirdad – Network and Information Security (NIS)-, cuyo texto remitió la Comisión al Europarlamento el pasado mes de mayo, será aprobada en julio en primera lectura para que pueda entrar en vigor en agosto y contará con 21 meses para ser transpuesta por los Estados miembros.
La normativa llega para impulsar la confianza entre los diversos Estados miembros de la Unión Europea, armonizando la seguridad en las redes y creando un ámbito de intercambio de información capaz de prevenir los ataques por el resto de las Administraciones, una vez sufrido un incidente de seguridad una de ellas y dar una respuesta coordinada y europea frente a esta nueva amenaza cuyos potenciales riesgos son innumerables.