Los empleados de la aerolínea Lufthansa, junto al personal de seguridad de los aeropuertos de Frankfurt y Hamburgo han decidido ponerse en huelga por el lento avance de las negociaciones para una revisión de su salario, el que exigen que sea 2,8 euros más por hora, para equiparlo al nivel adquisitivo perdido por culpa de la inflación. Se calcula que al menos 1.000 vuelos serán cancelados los próximos días por culpa de las protestas. Lee más información aquí.