Terrorismo y delincuencia organizada.

La convergencia entre el terrorismo y la delincuencia organizada es un fenómeno preocupante que ha sido, es y seguirá siendo objeto de estudio y atención por parte de expertos en seguridad y organismos internacionales. Aunque el terrorismo y la delincuencia organizada son dos fenómenos distintos, en ocasiones se superponen y se produce una convergencia entre ellos. Veamos, brevemente, algunos aspectos de esta convergencia:

Financiación: tanto el terrorismo como la delincuencia organizada requieren recursos financieros para llevar a cabo sus actividades. En algunos casos, los grupos terroristas han recurrido al narcotráfico, el tráfico de armas, el contrabando de bienes y otras actividades delictivas para obtener recursos financieros. Al colaborar con organizaciones criminales, los grupos terroristas pueden obtener dinero y recursos para financiar sus operaciones.
Logística: la delincuencia organizada tiene experiencia en el contrabando, el tráfico de personas y la logística operativa, lo que puede resultar atractivo para los grupos terroristas. Estas redes criminales pueden brindar apoyo logístico a los terroristas, facilitándoles el transporte de armas, explosivos o incluso la infiltración de personas en zonas sensibles.
Intercambio de conocimientos: la convergencia entre el terrorismo y la delincuencia organizada también puede implicar el intercambio de conocimientos y habilidades. Por ejemplo, pueden intercambiar información y aprender sobre técnicas de guerrilla urbana, manejo de armas, técnicas de evasión o comunicaciones.
Uso de la violencia: si bien tanto el terrorismo como la delincuencia organizada utilizan la violencia para alcanzar sus objetivos, sus motivaciones y métodos pueden diferir. Los grupos terroristas buscan difundir el miedo y la inseguridad para promover cambios políticos o sociales, mientras que la delincuencia organizada busca obtener beneficios económicos. Sin embargo, en algunos casos, estos objetivos pueden superponerse, y los grupos pueden colaborar o aprovecharse para alcanzar sus metas.
Desafíos para la seguridad: la convergencia entre el terrorismo y la delincuencia organizada plantea desafíos significativos para los esfuerzos de seguridad y aplicación de la ley. Estos grupos combinados pueden volverse más peligrosos y difíciles de combatir, ya que aprovechan las ventajas y recursos de ambos fenómenos. Además, la lucha contra esta convergencia requiere una cooperación y coordinación efectiva entre las agencias de seguridad nacionales e internacionales.

Hay que subrayar que no todos los grupos terroristas se involucran con la delincuencia organizada, ni todas las organizaciones criminales tienen vínculos con el terrorismo. Sin embargo, cuando se produce esta convergencia, representa una amenaza significativa para la seguridad global y requiere una respuesta integral y coordinada de la comunidad internacional.

Más aquí: