El comandante Gonzalo Pérez de la Guardia Civil, curtido en lucha antiterrorista, perteneciente a los servicios de inteligencia, era el encargado del peligroso despliegue de los militares españoles en Irak.
Hace 15 años fue emboscado por un grupo criminal y termina siendo alcanzado por un disparo en la cabeza. Tras 13 días de agonía es encontrado por las fuerzas españolas y trasladado al Hospital Central de la Defensa en Madrid, donde se termina certificando su defunción el pasado 5 de febrero de hace 15 años.
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