Los progresos en Inteligencia Artificial (IA) están modificando profundamente nuestra sociedad y, en nuestro ámbito, el paradigma de la seguridad. Se estima (IDC- International Data Corporation) que la inversión de entidades públicas y privadas en la adopción de soluciones de IA sobrepasó los 500 mil millones de euros en el año 2023. Brad Smith, ejecutivo de Microsoft, ha destacado recientemente que la IA y el machine learning han logrado un grado de avance actual, que estaba previsto, originalmente, para una década después, gozando de una capacidad sorprendente en el análisis de grandes conjuntos de datos e innovando en distintas áreas de la seguridad de forma sorprendente.
Ya operan algunas tecnologías que demuestran esta tendencia al hiperdesarrollo, como la plataforma tecnológica presentada hace meses por Securitas Direct que, a través de la tecnología PreSense, combina sensores, inteligencia artificial, análisis de grandes volúmenes de datos, IoT (internet de las cosas) y algoritmos predictivos para identificar de manera anticipada y más efectiva posibles intrusiones e incidencias. Esta solución de vanguardia desarrolla modelos predictivos que estiman el riesgo asociado a una alarma activada, logrando así disminuir los tiempos de detección y confirmación a menos de 20 segundos, un hito sin precedentes en el sector.
La tecnología PreSense consta de una variedad de aplicaciones y herramientas que permiten la detección, el seguimiento y la interpretación de gestos o movimientos humanos mediante el uso de sensores o cámaras, sin necesidad de contacto físico. Estas tecnologías pueden emplearse en múltiples ámbitos, desde el control de interfaces de usuario hasta la mejora de la accesibilidad para personas con discapacidad.
Un ejemplo concreto de uso de tecnología PreSense en el ámbito de la seguridad privada sería un sistema avanzado de vigilancia y control de acceso que utilice reconocimiento de gestos y patrones de movimiento para identificar y autorizar la entrada de personas a un edificio o área restringida.
Supongamos un sistema de seguridad para un edificio de empresas que incorpore cámaras equipadas con tecnología PreSense en sus puntos de acceso. Este sistema está diseñado para detectar y analizar los movimientos y gestos específicos de las personas que intentan acceder a las instalaciones. Por ejemplo, podría requerir que los empleados realicen un gesto particular o una secuencia de movimientos reconocida solo por el sistema como un método de autenticación.
Además de la autenticación basada en gestos, el sistema también podría utilizar la detección de patrones de movimiento anormales para identificar comportamientos sospechosos o no autorizados alrededor de las entradas o dentro del edificio. Por lo que, si una persona intenta forzar una entrada o se mueve de manera errática cerca de áreas restringidas, el sistema podría alertar automáticamente al personal de seguridad para una respuesta rápida.
Este enfoque ofrece varias ventajas sobre los métodos tradicionales de seguridad. En primer lugar, al utilizar gestos específicos como método de autenticación, se reduce el riesgo de acceso no autorizado mediante llaves físicas o tarjetas de acceso, que pueden perderse o ser robadas. Además, la detección en tiempo real de comportamientos sospechosos o no autorizados permite una respuesta de seguridad más rápida y eficaz, potencialmente deteniendo incidentes de seguridad antes de que ocurran. Finalmente, este sistema PreSense proporciona un método de seguridad no intrusivo y respetuoso con la privacidad, ya que no requiere el almacenamiento de información personal o biométrica delicada.
Es evidente que la inteligencia artificial se utiliza cada vez más en el campo de la seguridad privada, donde ha introducido mejoras inimaginables hace tan solo pocos años. Algunos de los usos más comunes de la IA en este ámbito son:
- Vigilancia y Monitoreo: Como se ha comentado, los sistemas de cámaras de seguridad equipados con IA pueden realizar un control con monitores constante de áreas extensas y analizar automáticamente el vídeo en busca de comportamientos sospechosos. La detección de anomalías puede alertar a los operadores de seguridad en tiempo real.
- Reconocimiento Facial: La tecnología de reconocimiento facial basada en IA permite identificar personas en tiempo real. Puede utilizarse para controlar el acceso a instalaciones, detectar personas no autorizadas y proporcionar registros de entrada y salida.
- Análisis de Comportamiento: Los algoritmos de IA pueden analizar patrones de comportamiento en datos de vigilancia para identificar actividades sospechosas. Por ejemplo, puede detectar movimientos inusuales, como entrar en áreas restringidas o permanecer en un lugar durante mucho tiempo.
- Sistemas de Alarma Inteligente: La IA puede mejorar los sistemas de alarma al reducir las falsas alarmas. Los sistemas pueden aprender a distinguir entre eventos normales y situaciones de riesgo, minimizando las interrupciones innecesarias.
- Gestión de Datos de Seguridad: La IA puede ser utilizada para analizar grandes cantidades de datos de seguridad, como registros de acceso, para identificar patrones y tendencias que podrían indicar actividades sospechosas o vulnerabilidades en la seguridad.
- Patrullaje Robótico: Robots equipados con tecnología de IA pueden realizar patrullajes autónomos en áreas predefinidas. Estos robots pueden monitorear constantemente su entorno, detectar intrusos y proporcionar información en tiempo real a los centros de control.
- Sistemas de Detección de Amenazas: La IA puede ayudar a mejorar los sistemas de detección de amenazas, como la identificación de objetos peligrosos en imágenes de rayos X o la detección de sustancias sospechosas.
- Análisis Predictivo: Utilizando algoritmos de aprendizaje automático, la IA puede prever posibles amenazas y ayudar en la toma de decisiones proactivas para fortalecer la seguridad antes de que ocurran incidentes.
La implementación de la inteligencia artificial en la seguridad proporciona un enfoque más inteligente y resiliente para hacer frente a las amenazas y mejorar la eficiencia de los sistemas de seguridad existentes.