Erupción del volcán Cumbre Vieja.

Hace ya una semana que el Gobierno de Canarias activó el Pevolca (Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias). La entrada en erupción el domingo 19 a las 15.15 ha provocado la evacuación masiva: en torno a 5.000 personas hasta la medianoche del domingo.

El Índice de Explosividad Volcánica (VEI) está entre 1 y 2. El VEI se determina a base de: el volumen de los productos expulsados, la altura de la nube eruptiva y la descripción del tipo de la erupción y puede tener valores entre 0 (erupciones no explosivas) y 8 (erupciones muy explosivas).

Estamos ante una erupción de tipo estromboliano que se caracteriza por explosiones alternadas con periodos de calma.

En las primeras horas la lava ha ido avanzando a unos 700 metros por hora. La situación puede ser cambiante pero de continuar como hasta ahora las coladas de lava[1] se dirigen al mar, aunque el riesgo de incendios forestales es muy alto.

El magma ha provocado inicialmente dos bocas eruptivas por las que fluían coladas de lava. Según el Instituto Volcanológico de Canarias (INVOLCAN), en pocas horas, se ha pasado de dos a siete fisuras.

En los últimos días se ha registrado una deformación de la isla de 15 centímetros, un abombamiento del terreno que vendría a indicar la presencia de magma en el subsuelo, y que ejerce presión hacia la superficie.

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[1] Una efusión de lava en la superficie terrestre desde un punto de emisión o fractura. También el termino se emplea para las “lenguas” de lava que ya se han enfriado y solidificado. (IGN, Glosario de términos volcánicos).